Asociación de Veteranos de Dragados

(Publicado  en versión reducida en ABC el 10.03.18).

No parece que el PSOE esté en la línea de actuar con sentido de Estado. Pedro Sánchez se ha levantado de la mesa del pacto por la educación que todos los españoles –de cualquier ideología- están reclamando para que perviva en los próximos lustros un  modelo a respetar mande quien mande. El PSOE sabrá lo que hace. No es de recibo la escusa de  que si no se invierte  un 5% del PIB no sigo en la mesa.  Cuando se diseña un nuevo modelo  de coche o se proyecta un edificio es imposible saber cuánto va a costar hasta que no se tiene definido el prototipo. En el caso que nos ocupa, tal vez sea necesario un 6% o quizá baste con un 4. La alarmante  baja natalidad actual  quizá no  exija en el futuro un gran  aumento de la inversión en educación.  Quizá, quienes se mantienen en la mesa del pacto por la educación  debieran empezar impulsando  una mejora de   la actual gestión de la educación, incluida la universitaria.  A lo mejor si se selecciona, se forma y motiva mejor al profesorado, si se introduce la evaluación  del desempeño de los docentes y los centros educativos, si se implanta  seriamente el concepto de productividad  de lo que se invierte en educación (dinero de todos los españoles)  con los resultados que se produce (tasas del abandono del 30 % en la universidad, titulaciones que ya no sirven, o sea, un dineral en pérdidas anuales)  podría abaratarse los costes de la educación. Pero lo que no vale es romper la baraja antes de saber qué  cartas tienes.