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 TERTULIA DE NUESTRO MUNDO - NM50 EL PROBLEMA DE LA INMIGRACION HACIA EUROPA - PARTE I/V

Categoría: El hombre y su tiempo
Fecha: 01/03/2019

EL PROBLEMA DE LA INMIGRACION HACIA EUROPA. Carlos Paris.

            Es habitual hoy en día ver como ante distintos problemas que se plantean en nuestras sociedades europeas, los políticos, los medios de comunicación e incluso los peritos en la materia se afanan urgente e irreflexivamente, con inusitada ligereza, en sugerir solucionesa los mismos.

Del mismo modo que no se puede acometer, con alguna garantía de éxito, la curación de una enfermedad si con anterioridad no se ha hecho un cuidadoso diagnóstico de ella, para afrontar los problemas que plantea la emigración se requiere un análisis previo de los factores que laoriginan.

Dado que el proceso de inmigración se desarrolla desde una ubicación de origen a otra de destino, parece conveniente analizar por separado las cuestiones que se plantean en cada una de esos dos enclaves.

Cuestiones previas

 En principio, todo país tiene derecho a la inviolabilidad de sus fronteras y al mantenimiento de sus tradiciones, costumbres y religión.

Si la inmigración no respeta las fronteras, está transgrediendo los derechos del país de destino, por lo que, independientemente de las acciones legales a que ello pueda dar lugar, se convierte en una emigración no deseada. Algo parecido ocurre si los inmigrantes no se muestran abiertos a hacer suyo el ideario del país receptor, no se integran y, consecuentemente, tienden a formar guetos. Este problema se presenta especialmente con los inmigrantes musulmanes.

Es evidente, por tanto, que todo país europeo prefiere a inmigrantes legales y lo más afines posible a su propia civilización. Es el caso de España con los inmigrantes de origen sudamericano.

En este escueto análisis nos referiremos exclusivamente a la inmigración africana, que es la que mayores problemas plantea y, por ello, la menos deseada.

El problema en origen

La pregunta básica surge de inmediato: ¿por qué quieren los africanos, con un deseo irrefrenable, jugándose la vida en ocasiones,huir de sus tierras de origen y recalar en Europa? 

Los motivos, en origen,son fundamentalmente de dos tipos:         

·         Desear mejorar la calidad de vida.

·         Evitar verse afectado por conflictos armados, usualmente generados por diferencias tribales o levantamientos contra el poder establecido.

Evidentemente, no todos los países africanos se encuentran en la misma situación. Los hay que presentan una situación evidente de penuria en su hábitat natural.Tras las descolonizaciones, muchas de las sociedades africanas no han evolucionado apenas hacia posiciones de mayor bienestar o, en todo caso, lo están haciendo muy lentamente. Entre los factores que se encuentran detrás de ese escaso desarrollo cabe citar una economía muy poco diversificada, unas materias primas que los trusts europeos pagan a muy bajos precios, una escasa capacidad de inversión, un escaso nivel cultural, y unas estructuras políticas muy inestables y, con alguna frecuencia, en manos de líderes corruptos.

Pero, curiosamente, no son estos países los que aportan el mayor flujo migratorio. Para poder hacer frente a un viaje de varios meses hasta España hay que partir de una situación física más que aceptable y de una económica que permita hacer frente a los elevados gastos del viaje. La mayoría de los individuos que viven en esos países pobres no están en situación de poder afrontar esas exigencias. No hay más que ver la buena condición física que suele apreciarse en los inmigrantes que llegan a la península. Esos no proceden de la penuria.

Los hay, por el contrario, que presentan un nivel económico y una situación política de cierto nivel, lo que permite vivir en ellos una existencia más que digna. ¿Por qué desean emigrar, entonces?

La respuesta está en los actuales medios de comunicación quellegan a todos los rinconesdel mundo y que muestran a los nativos un modo de vivir en los países de Europa Occidental que, en su ingenuidad, contemplan como un verdadero paraíso al que hay que acceder a toda costa. En estos medios no se muestra cómo viven los europeos debajo nivel y, mucho menos, cómo lo hacen los inmigrantes que en esos países se encuentran.

Por otra parte, el menor valor que en esas culturas se da a la vida facilita que los potenciales inmigrantes se muestren dispuestos a correr riesgos en sus desplazamientos que, con toda seguridad, muchos europeos no estarían dispuestos a afrontar.

En cuanto a las diferencias tribales, sus motivos se pierden en los orígenes de lostiempos, pero es evidente que se han visto impulsadas más tarde por los establecimientos de fronteras impuestospor los antiguos colonizadores, absolutamente ajenosa las distintas implantaciones de cada etnia,así como a sus distintas culturas, costumbres y religiones.

El problema en destino

La inmigración no es un proceso que, de entrada, deba considerarse perjudicial para el país de destino. Hay dos razones fundamentales para ello:

·         La necesidad de mano de obra para determinadas actividades

·         La escasa tasa de natalidad que está conduciendo a un indeseado envejecimiento

de la población y que, únicamente la inmigración puede paliar.

Hemos visto, al inicio, como cualitativamente la inmigración africana nos es la más deseada por los países europeos.En el aspecto cuantitativo, por su parte, todo país pretende no recibir más inmigrantes de los que realmente necesita y, como techo, no más que aquel que rebasa ampliamente las necesidades del país anfitrión y que da lugar a bolsas de marginación. Esto se debe a que la atención social a inmigrantes no necesarios grava innecesariamente los costes en el país de destino, mientras que los guetos ponen en cuestión la estabilidad y convivencia ciudadana.

Para determinar la situación en cada momento, se requiere contar con suficiente información estadística tanto en lo relativo a las necesidades de inmigrantes como a la cantidad de ellos que residen en el país, teniendo en cuenta que muchos de ellos utilizan a países del sur como acceso a Europa central y del norte.

Posibles acciones a emprender

Con independencia de los intereses del país receptor, en relación con la emigración, se plantea la cuestión humanitaria. Parece evidente que, dentro de las capacidades de éste, es obligado dar acogida a los refugiados que huyen de guerras, epidemias, catástrofes, etc. Además ya se ha apuntado que, en todo caso, su número es escaso.

Pero, ¿qué hacer con los emigrantes que no tienen el carácter de refugiados y que pretenden acceder a Europailegalmente en pequeñas y peligrosas embarcaciones, jugándose la vida?

No hay más que una solución: Disuadirles de emprender su viaje emigratorio.

Para ello, se puede actuar de dos modos:

·         Mejorando su situación en origen

·         Dificultando el proceso de asilo y difundiendo su dificultad.

La mejora en origen, en cooperación con sus respectivos gobiernos, puede desarrollarse en tres aspectos básicos: aplicando precios justos y reales a las transacciones comerciales, invirtiendo a fondo perdido para el desarrollo de la agricultura, laminería y las comunicaciones, y contribuyendo a la educación de los jóvenes mediante la instalación y operación de centros adecuados.

En cuanto al segundo modo, la mejor solución sería devolver a los emigrantes a su lugar de origen. En el caso de no ser ello posible por desconocimiento u ocultación del mismo, se les ubicaría en campamentos donde quedarían recluidos sine die hasta que se les reclamase desde algún enclave africano o un cambio en las necesidades del país de destino hiciera posible su inmigración legal. Sería absolutamente necesario fomentar la difusión de esta situación para que se diese el buscado objetivo de disuasión.

Dado que hay países europeos como España donde sus fronteras constituyen, a los efectos de inmigración, las fronteras de la Comunidad Europea, esta política de asilo para refugiados, y de mejora en origen y disuasión para los no refugiados, debe formar parte de una estrategia común de la Unión Europea, la cual debe correr con los gastos que de ella se deriven.

INMIGRACIÓN. De Raúl Celestino

Reconozco que tengo sentimientos contrapuestos cuando se trata de la inmigración.

Por un lado tengo me siento culpable por percibirlo como un problema, “no puede ser que aquí entre todo el que lo pretenda, nuestras capacidades tienen un límite”, por otro no creo que podamos cerrar las fronteras ante un problema real de mucha gente que en su país no encuentra unas condiciones de vida que les permita sobrevivir de forma mínimamente razonables.

Cuando se arguye, no sé si como excusa, que es que los que vienen deben asumir nuestras costumbres, nuestra cultura y nuestras creencias, recuerdo que la mayoría de los países, entre ellos España, han formado esas costumbres, la cultura y las creencias por aportaciones que han recibido de otros que han llegado, ya sea poco a poco de forma pacífica o por invasiones, unas veces por pueblos de cultura inferior y otras por culturas superiores, unos de forma pacífica y otras muchas por la imposición de la fuerza.

¿Recordamos lo de España “crisol de culturas”? De forma independiente de lo que para cada uno le pueda suponer el momento en que aprendiese la frase, está claro que a muchos de nosotros nos iba a ser muy complicado poder demostrar “limpieza de sangre”, pues casi todos somos una mezcla, más o menos complicada, de todos los pueblos que han ido formando nuestra raza. He escrito “casi todos” porque reconozco las razones de algunos habitantes de la Península Ibérica que proclaman que su “raza, cultura y/o lenguaje” han llegado puras desde hace miles de años hasta nuestros días. Allá cada cual con sus limitaciones.

Pero ni siquiera es necesario retroceder tanto en nuestra historia. La emigración ha sido en los últimos cien años un recurso que nos ha ayudado a resolver muchos de nuestros problemas.

No podemos olvidarnos de lo que debemos a Iberoamérica, prefiero llamarla así a América Latina, que recibió a nuestros emigrantes económicos de finales del siglo XIX, a los emigrantes políticos huidos de nuestra guerra civil (Francia los recibió encerrando a la mayoría en campos de concentración, hasta que los países americanos les fueron abriendo las puertas, aunque no todos fueran igual de generosos). Luego, en la segunda mitad del siglo XX, Europa fue destino de muchos españoles, que con sus remesas de dinero a sus familiares que se quedaron, permitieron el inicio del desarrollo con más divisas de las que se obtenían con las escasas exportaciones de nuestros productos industriales.

De pronto, y muy recientemente, hemos vuelto a formar parte del mundo próspero, y esa circunstancia nos ha convertido en objeto de deseo de los habitantes de otros pueblos menos afortunados que nosotros. Realmente esa conversión en “objeto de deseo” debe matizarse. España es frontera del mundo próspero, y pocos de los que llegan aquí pretenden quedarse, quizás los iberoamericanos por aquello de la lengua común, pero sea como sea, estamos dentro del fenómeno. 

Siempre he tenido la impresión de que los españoles, también somos un pueblo xenófobo, sentimos recelo de los diferentes, de los que no tienen nuestra raza y religión. En mi generación todos nuestros compañeros y amigos eran igual que nosotros, las diferencias eran de acento y de posición social, pero todos éramos blancos y cristianos (quizás ambas cosas con matices). Recuerdo que la primera vez que fui a Londres, fue el año 1954, me impresionó el número de personas de tantas razas, si bien es verdad que para los british, todos eran inferiores a ellos, incluso nosotros los españoles. En los colegios de mis nietos los alumnos tienen razas y creencias varias. Supongo que eso los hará mejores.

Una anécdota. Llegué a Madrid con siete años desde Sevilla, y el primer día de clase en el colegio, tuve que defenderme en el recreo del cachondeo que se organizó porque a la tinta roja la llamé colorada. Tan poco acostumbrados estábamos entonces a los diferentes acentos.

Después de haber leído las notas remitidas por Carlos y Miguel, tan bien estructuradas y tan centradas en el asunto, al leer lo que he escrito me ha dado la impresión de no haber conseguido expresar lo que me proponía.

Por si acaso, hago un resumen:

1.   Recibir y compartir país con los que vienen en busca de trabajo y desarrollo personal, es un deber, aunque solo sea por demostrarnos que sabemos agradecer los que otros hicieron por nosotros cuando lo necesitamos.

2.   Está demostrado que la inmigración produce beneficios a medio y largo plazo. La mayoría de los países de destino tienen una población envejecida que necesita gente joven que aporte población y fuerza de trabajo.

3.   Está claro que los que llegan necesitan ayudas y tiempo de adaptación. También que hay que procurar laminar las llegadas. Para conseguirlo, la necesidad de salir de donde se está ha de ser menos urgente, por lo que esos países de origen deben ser ayudados. El problema muchas veces está en que tienen estructuras políticas y sociales que impiden, o al menos dificultan, que esas ayudas sean eficaces.

4.   El efecto llamada lo ha producido la prosperidad que ha alcanzado el conjunto de los países que componen la Unión Europea. Esta prosperidad no es homogénea, y no solo la causa es los diferentes puntos de partida de cada uno de los países que la conforman, sino también porque las reglas con las que se buscó la homogenización fueron redactadas de forma que beneficiaron preferentemente a los que eran los más poderosos.

5.   El camino de entrada de los emigrantes, empieza en los países frontera, que son precisamente los menos favorecidos en esa prosperidad común (España, Italia, Grecia...).

6.   Las ayudas que reciben esos países frontera, son principalmente para mejorar el control de las llegadas, con misiones que no siempre pueden ser cumplidas, casi siempre debido a razones humanitarias. El resultado es que esos emigrantes terminan desembarcando en alguno de los países ribereños, excepto si cuenta con un gobierno que ha decidido hacer caso omiso a otras razones que a la de no querer compartir lo que tienen.

7.   El emigrante desembarcado, difícilmente puede trasladarse a otro país dentro de la UE, por lo que al primer receptor le quedan las siguientes opciones, devolverlo a su país de origen, olvidando o despreciando las razones por las que lo abandonó, devolverlo al último país que estuvo, poniéndolo de nuevo en manos de las mafias que le aseguraron un transporte seguro, o asimilarlo.

8.   Desde el punto de vista humanitario, tan solo la última opción es razonable. Lo que no es razonable es que el resto de países de la Unión se desentienda del asunto.

INMIGRACIÓN. De Enrique Cabellos.

Mientras que en Europa los nacionalismos son “etnicistas” (alemán, bávaro, vasco, catalán) el nacionalismo USA es “cívico” e incluye al irlandés, italiano, cubano.Si paga impuestos en USA es americano. Se siente americano en sentido político, aunque no religiosos ni étnico. Es fácil triunfar como extranjero como lo demuestran Kissinguer, Margareth Albright, Condoleezza Rice, Obama, o la pléyade de artistas del cine y del entretenimiento. Tristemente la gente de cada país acepta los clisés que se le imponen desde pequeño (catalán avaro, andaluz simpático, Tchaikowsky es alma rusa, Ravel francesa, Falla española). Las emociones son cruciales en política. Sin emociones no se ganan elecciones y Trump derrota a Clinton apoyado por eslóganes que impactan sin cuestionar su veracidad. Ni tampoco un líder puede acaudillar a su pueblo si no emociona. Si esto es tanto así un tema como la inmigración está tejido de mitos, de patrañas, y de lo que transmiten las temibles redes sociales.

La inevitable globalización exige viajar y salir al mundo, saber idiomas, aceptar a inmigrantes, que tus hijos se casen con extraños, y todo ello genera miedo y resistencia al cambio, e incita a encerrarse en tu pequeña comunidad. No olvidemos que la temible resistencia al cambio es, ha sido y será la principal causa de todos los conflictos de la humanidad y, por descontado, la bestia negra de los negocios, de la actualización de políticas económicas, religiosas y sociales. La UE ha sido más económica que emocional y no ha creado mitos europeos que puedan llamar la atención de 400 M de ciudadanos que deberían llevar en la sangre el rechazo a la guerra y al conflicto, y no deberían olvidar el espíritu de los grandes constructores de nuestra Europa (Adenauer, de Gasperi, Schumann, Jean Monnet, Spaak, de Gaulle a pesar de sus “patrias”); a los niños se les educa en mitos locales que en su mayoría son antieuropeos y anti globalización. Esta es una visión que creo que coincide con lo que hace poco exponía el historiador José Álvarez Junco.

Otra visión, también en función de la historia, partiría del fin del imperio romano. Fueron muchas las causas, algún historiador ha llegado a 999, pero tal vez la fundamental fue la incorporación cada vez mayor de los pueblos bárbaros procedentes del norte, que limaron su “barbarismo”, manteniendo formas de vida, cultura y concepto religioso de la divinidad y del poder, al tiempo que se integraban en la sociedad y administración imperial. Alarico era ciudadano romano bajo el imperio de Teodosio pero, cuando muere en 410, el mundo ha cambiado y el mundo visigodo se ha impuesto sobre Roma. En Europa la inmigración es admitida cuando procede de ámbitos culturales similares. En España vemos cómo los sudamericanos se integran aceptablemente, incluso los balcánicos y rusos demuestran su aptitud con buenos conocimientos tecnológicos y una cultura común del cristianismo ortodoxo que se encaja muy bien en nuestra cultura. El problema básico en España y Europa es el islamismo. Incluso el Islam como doctrina podría encajar, pero el actual islamismo dista mucho del de Al Andalus, e incluso del de oriente como Indonesia. Nuestros vecinos franceses han sufrido con sangre ciertas últimas revueltas. Todavía no se les percibe cercanos, pero en ciertos barrios de las grandes ciudades vemos como imponen su ley. Mezquitas que crecen, negocios exclusivos enfocados al islam, marginación del vecino español que se siente diferente, y un tanto expulsado de su ambiente de toda la vida. Es una gran diferencia de la inmigración china que monta negocios muy eficientes y que nunca presiona en lo cultural, ni en lo religioso, mientras se adapta a nuestros gustos, nuestros horarios, y procura no molestar porque su prioridad es su negocio.

No hablemos solo de inmigración. El mundo árabe rico y poderoso también entra en nuestra sociedad. Bancos, negocios, grandes clubes de futbol, están dominados por los petrodólares de grandes mansiones y dinastías. Pero detrás se ve una dominación y exclusividad cuando los “forofos” de nuestro futbol quieren asistir a un partido de su equipo en territorio islámico y los españoles son tratados como ciudadanos de segunda. La última es que si van acompañados de su esposa española solo pueden acceder a entradas marginales y separadas. Es un “apartheid” islámico, por la gracia de su dios.

El problema de la inmigración por el estrecho de Gibraltar no reside en su cantidad. Veamos los números.

Nº nacimientos en 2013:   425.000   >>   en 2018:   391.930

Nº fallecidos     en 2013:   390.400   >>   en 2018:   423.640

Saldo crecim vegetativo:  + 34.600>>-  31.710

Inmigrantes patera      20 – 30.000   >>>                    56.000 (sube mucho por el cierre de Italia, Grecia y Malta)

Son cifras asumibles, teniendo en cuenta la política de favorecer su transporte hacia el norte, e incluso los buses privados que los llevan de viaje a otros países europeos. (esto es real, pero no se puede decir por políticamente incorrecto).

La década 2000-10 fue en Europa la del gratis total. Los tipos de interés bajan al 1% en 2003-06 y vuelven a bajar en 2008-10 al 0-1%. El petróleo barato hasta el pico de 2008. viajes baratos por el lowcost y combustible barato. Informática barata, el portátil lo regala el banco. Diarios gratis, Web gratis, wikipedia, redes Facebook, Twiter, Tuenti, e-mail, descargas de cine y música todo gratis. Seguridad Social gratis para todos incluso inmigrante sin papeles. Pero la Europa de 2019 ha cambiado. Se vive peor porque todo occidente ha perdido mucho fuelle y oriente cada vez adquiere más poder, más influencia comercial y social, y estamos al comienzo de algo que podría parecerse a la caída del imperio romano con salvedades. La Europa que creó Roma, cayó y se ocultó durante casi mil años, hasta que reverdeció el humanismo renacentista en s. XV. Da la impresión de que en pleno s. XXI hay otro proceso semejante de consecuencias impredecibles.

 

RAICES de la INMIGRACIÓN. Fernando Sotomayor – Carlos Paris

Bajo mi punto de vista para comprender mejor la situación actual de África y el gravísimo problema de la emigración de la población del Sahel hacia los “paraísos blancos” debemos remontarnos al fin del periodo colonial.

Los imperios coloniales, Reino Unido, Francia, Portugal, etc.; crean mediante la fuerza de las armas o mediante tratados diplomáticos, fronteras artificiales entre sus posesiones; sin tener en cuenta ningún criterio realista de los accidentes geográficos, clima, o vegetación que pueden conformar una región geográficamente homogénea (lo importante era poseer tierra y mientras más mejor).

Pero esta situación afecta gravemente a la distribución geográfica de los grupos étnicos afincados en esos territorios desde mucho antes que aparecieran los “blancos”, y que comienza a provoca desconexiones, desarraigos, y en último extremo rupturas y migraciones en las etnias afectadas.

(Entiendo como etnia, una comunidad humana definida por afinidades raciales, lingüísticas, culturales, religiosas, etc.)

 

CONTROL DE LA INMIGRACIÒN. Miguel Jordan

Los problemas que se plantea en Europa y en el tema que nos ocupa, en España, son de dos tipos, por un lado está el cómo controlar la inmigración ilegal y por otro, qué tipo de inmigración consideramos el adecuado y qué cantidad de inmigrantes consideramos idóneo.

1.-INMIGRACION ILEGAL

Veamos cómo se plantea en la UE el control de la inmigración.

La RED EUROPEA DE MIGRACIÒN en su informe “Medidas prácticas para la reducción de la inmigración irregular” ha realizado un estudio exhaustivo sobre este tema. Propone:

·         Control antes de que se produzca la entrada:

§  Proporcionar información sobre los requisitos legales para entrar en un país.

§  Gestión de los visados

§  Cooperación con los transportistas

§  Análisis de las rutas migratorias

§  Cooperación con terceros países

·         Control a la entrada:

§  Control fronterizo

§  Patrullas marítimas

§  Sistemas de detección de la presencia de seres humanos

§  Detección de documentos falsificados

·         Control durante la estancia:

§  Prevención del trabajo irregular

§  Controles en núcleos de viaje

§  Retorno rápido

§  Retorno voluntario asistido

§  Acuerdos de readmisión

Cada uno de estos puntos y la forma de realizarlo por los diversos países de la UE.

1.1 CONTROL ANTES DE QUE SE PRODUZCA LA ENTRADA

Para evitar la posible inmigración irregular antes de que se produzca, puede resultar útil proporcionar información sobre los requisitos legales de entrada, por ejemplo, en sitios web como el Portal de la Inmigración de la UE y los portales web nacionales De este modo, se puede evitar la inmigración irregular de nacionales de terceros países debida al desconocimiento de esos requisitos. Las campañas informativas también evitan la migración porque advierten de los riesgos de hacerlo de forma irregular. Este tipo de medidas resultan más eficaces cuando tienen objetivos concretos, se dirigen especialmente a grupos «de riesgo» y se enmarcan en una estrategia global de prevención. También se mejora la eficacia cuando las campañas se repiten. 

Todos los Estados (miembros) afirman que un sistema eficaz de gestión de visados constituye una medida preventiva esencial para reducir la inmigración irregular. En algunos de ellos, el visado es uno de los ejes clave de la gestión de la inmigración, pues solamente se pueden emitir autorizaciones de residencia a nacionales de terceros países que han entrado en el país con visado. Los representantes consulares que emiten visados desempeñan una función de gran importancia para la detección de posibles inmigrantes irregulares antes de la salida y de documentos falsos y declaraciones de motivos fraudulentos para la migración (por ejemplo,certificados de matrimonio o declaraciones de paternidad falsos). En este sentido, las oficinas consulares, así como los oficiales de enlace de inmigración desempeñan una función esencial comunicando a las autoridades de los Estados miembros información necesaria para los procesos de planificación y gestión de riesgos.  

Antes de la entrada, la cooperación con los transportistastambién ha resultado especialmente eficaz para prevenir la inmigración irregular. Si el personal de estos operadores recibe formación para identificar documentos falsos, esto facilita el trabajo de las autoridades de gestión fronteriza. Para fomentar el cumplimiento de la legislación por parte de los transportistas (por ejemplo, de las disposiciones de la Directiva 2004/82/CE del Consejo) algunos Estados miembros imponen sanciones a aquellos que proporcionen información incompleta o incorrecta sobre los pasajeros. Otros, en cambio, han introducido planes de incentivos y fomentan una colaboración más estrecha para asegurar su cumplimiento.  

El análisis continuo de las rutas migratorias y otros esfuerzos de recopilación de información para aportar datos a las evaluaciones de riesgos constituyen importantes medidas para planificar las prácticas fronterizas y las políticas a largo plazo basándose en las tendencias o los futuros riesgos identificados. La red de análisis de riesgos FRONTEX (FRAN, FRONTEX RiskAnalysis Network) reviste gran importancia en este sentido, pues permite el intercambio información entre los Estados miembros sobre aspectos como las tendencias de las rutas migratorias, de falsificación de documentación o de otros medios fraudulentos utilizados para entrar en los Estados miembros. 

1.2 CONTROL EN LA ENTRADA

Las medidas prácticas adoptadas en la entrada y, en concreto, las relativas a los controles fronterizos han demostrado su eficacia hasta la fecha.

 En el mar, los sistemas de patrulla han salvado las vidas de personas que se arriesgan en rutas marítimas peligrosas con destino a los Estados miembros del sur de la UE. También han permitido reducir en gran medida (dividiendo por diez) el número de inmigrantes irregulares que llegan por esta vía. A lo largo de la frontera terrestre oriental, un sistema de vigilancia que detecta la presencia de seres humanos ha permitido lograr una disminución no solo de los flujos migratorios irregulares, sino también del contrabando de productos.   Los recursos compartidos y las redes de información, tales como la base de datos de Interpol de documentos falsos o el Sistema Europeo de Archivo de Imágenes (FADO), son instrumentos importantes para detectar documentos fraudulentos en la frontera. Los Estados miembros intercambian asimismo información sobre documentos fraudulentos con la FRAN.

 En otros Estados (miembros), se llevan a cabo investigaciones especiales para detectar y prevenir la elaboración de documentos, en especial cuando existen vínculos con la delincuencia organizada. En otros Estados miembros se han establecido unidades de policía especializadas en la identificación de documentos falsos, para formar y prestar asistencia a las autoridades de gestión fronteriza. Los pasaportes biométricos constituyen una posible solución al fraude. Además, las representaciones diplomáticas y consulares en el extranjero desempeñan una función primordial en la detección de documentos falsificados

La cooperación fronteriza entre los Estados miembros para garantizar la seguridad de las fronteras interiores y con los países terceros vecinos (por ejemplo, investigaciones conjuntas, patrullas conjuntas y otras formas de cooperación) permite prevenir también la inmigración irregular, no solo en la UE, sino también en el país de origen. 

 

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